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Asunciones morales y valores de los agresores 

Con el desarrollo de nuevas tecnologías, los adolescentes usan con mayor frecuencia las redes sociales debido a, el entretenimiento que les ofrece y la interacción rápida y efectiva entre las personas. Desafortunadamente, estas herramientas han favorecido la aparición del ciberbullying."El ciberacoso no ha dejado de crecer y se ha convertido en una problemática presente en todas las culturas y regiones del mundo, tanto en su modalidad tradicional como online" (Clemente, 2017). Por tanto, nos preguntamos ¿Qué lleva a una persona a convertirse en un agresor en el mundo virtual? ¿Serán por ámbitos psicológicos o también morales?
En primer lugar, un factor importante que origina esta problemática es la aprobación moral de cyberbullying por parte de los agresores; ellos consideran el ciberacoso como algo que deben hacer y no está mal.  Eso es causado gracias a la influencia del clima escolar y el apoyo del grupo de iguales. Los agresores, al tener algunos desacuerdos o conflictos con algunos de los compañeros pueden facilitar la práctica de ciberbullying. Al realizar encuestas a estudiantes norteamericanos en dos años sucesivos; el primer año respondieron al cuestionario 3339 sujetos y el segundo año 2293. En concreto, a mayor aprobación moral del ciberbullying, mayores índices de agresión en Internet (con un incremento del 24% en la ratio de bullying en Internet) (Williams y Guerra, 2007).
Por otro lado, otro factor importante es la influencia de los mecanismos de desvinculación moral. Lo cual embarca los pensamientos y juicios que emiten las personas para justificar su comportamiento. Este factor es causado frecuentemente por la atribución hostil que suelen percibir los agresores al sentirse amenazados. Asimismo, las expectativas sobre los resultados de su acción consideran que lo que hacen no tendrá consecuencias. Sus conclusiones referentes a la agresión online parecen indicar que los mecanismos de desvinculación moral predicen significativamente la agresión virtual, llegando a explicar el 8% de la varianza de la conducta de ciberbullying (Pornari y Wood, 2010).
Finalmente, el último factor, es el de los valores interiorizados por los agresores y su influencia en la agresión online. Este factor abarca las creencias que tienen los agresores y que guían sus conductas a poner en práctica esa problemática. Asimismo,  se relacionan con otros factores como son sus pensamientos individuales y actitudes hacia la agresión y la ausencia del valor del respeto, responsabilidad y compañerismo. En un estudio realizado en Turquía con 300 estudiantes de educación secundaria, en el cual se evaluó la posible influencia de determinados valores en las conductas de ciberbullying. Los resultados indicaron que la ausencia del valor de respeto hacia los demás explicaba un 35% de la varianza de la conducta de ciberbullying. Otros resultados relacionados al poder explicativo de cada uno de los valores estudiados individualmente  fueron,  la ausencia del valor responsabilidad explicaba por sí solo un 25% de la varianza de ciberbullying y también en sus vertientes negativas o de carencias (Dilmaç y Aydogan, 2010).
En conclusión, con la información obtenida de este estudio podemos concretar que estos son algunos factores relevantes que causan este problema, la justificación de los actos, la creencia de que lo que se ha hecho no traerá consecuencias, la falta de valores, el apoyo de los grupos de iguales, entre otras. Lamentablemente, esta problemática ha llegado a estar presente en todos los países del mundo y eliminarla es muy difícil. Sin embargo, considero que con el apoyo de todas las personas, la difusión de la información a través de estas  y la supervisión de los hijos en el uso de las redes sociales podremos llegar paulatinamente a disminuir a futuro esta problemática que afecta a la sociedad.

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Los niños no han desarrollado  su capacidad de juicio moral y no saben distinguir entre lo bueno y lo malo

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