NO ESTÁS LIBRE

La historia del problema del cyberbullying se vincula al continente europeo. Para abordar este problema, es necesario conocer el origen de la palabra bullying. Proviene del vocablo inglés "bull " que significa toro. Para Dan Olweus (1993), el bullying es la forma de actuar enfurecido sobre los otros. Este psicólogo escandinavo se interesó en este problema a partir de estudios realizados en los años 70' sobre el suicidio de algunos adolescentes por agresión física y emocional que habían recibido por parte de sus compañeros de escuela. En los países más avanzados de Europa, por ejemplo, el acoso escolar comenzó a generar preocupación y reacción de las autoridades desde finales de la década de 1980. Con el paso del tiempo, la modernidad nos ha ido enfrentando a determinadas modalidades de acoso en plataformas digitales en el ámbito escolar. Este problema se haya reforzado en el mal uso de la tecnología por parte de los niños y adolescentes. Es otras palabras, la violencia (física) se ha trasladado a las redes sociales. Esta problemática ha adquirido el nombre de cyberbullying.

 

Según Anette Smith (psicóloga reconocida en Suiza), puede ser considerado como un subtipo de bullying, que abarca agresiones intencionales por parte de un individuo a otro, usando formas electrónicas de contacto que algunas veces pueden ser repetidas. Un país  está luchando por contrarrestar este problema en España. En el 2016, presentó un plan estratégico de Convivencia con 70 iniciativas. La iniciativa con más peso, según el ministro español fue la de un teléfono gratuito y activo todo el año para la asistencia de víctimas, familias o cualquiera que necesite información. Sin embargo, aún no se han mostrado resultados efectivos, ya que los incidentes siguen ocurriendo y con gran frecuencia. Lamentablemente, los niños y adolescentes no saben medir ese poder que poseen gracias a los dispositivos tecnológicos, un poder que hoy en día cobra vidas a nivel mundial.